Me llamo Cristina y me apasionan los susurros eroticos de madura ardiente, concretamente, los de mi tía BBW Encarna. Aquí no escriben muchas chicas, ya lo veo, por eso me he decidido a poner siquiera, un poquito de mí. Soy una teeneger, una adolescente enamorada, no diré de quién ni cómo, pero lo estoy. Desde hace tiempo siento algo muy fuerte por mi mismo sexo, por las chicas. Los hombres a mi corta edad ya han dejado de interesarme.
No hay nada mejor que la sensibilidad de una mujer, nada más profundo que todo su erótico saber. Y nada más real, que un beso de madura familiar. Un picotazo en familia, porque solo una señora me ha besado y ha sido mi tía carnal, Encarna.
Cuando yo era más jovencita, más de lo que soy ahora, nos quedamos solas una tarde de verano, y sería casi esta época de junio 24. Ella está divorciada y es hermana de mi madre, me contaba sus experiencias con chicos. Recostada en la mesa del comedor, la escuchaba embelesada, anodada, cariacontecida y hasta hechizada. Le miraba mientras sus labios me contaban aventurillas calentitas con hombres enrabietados.
Historias eroticas de mi tía con novios del pasado
Mientras tanto, no podía dejar de observar ese profundo escote desarbolado, desarrollado, esos pechos a su aire dejados y de balanceo obligado.
Se intuían grandes senos y pezones endurecidos mientras sus recuerdos afloraban rejuvenecidos. Su frágil y fina bata era muy poco para ese pecho grande y excitante. Me gustaba inclinar mi miraba para abajo con descaro.
Ella iba relatando a medida que yo me iba calentado. Percibiendo esas historias de categoría S como relatos X, o XXX, qué se yo. Al mismo tiempo que sus susurros eroticos de madura nostálgica, sus años perdidos y vividos, yo los engullía uno tras otro. Me los transmitía. De repente esta adolescente se le iba la mente. Y no podía otra cosa que mostrar a mi tía, mi suspiro de colegiala, mi admiración extasiada y un deseo sin freno directo a su seno.
Escuchando susurros eroticos de mi tía Encarna
Ella me iba contando historias íntimas con hombres que había tenido, y hasta eso, me excitaba, por su forma de decirlo. Me explicaba cómo uno una vez, un chico se la llevó a su coche, tras salir de una discoteca y allí la empezó a magrear.
-Sí, me llevó al coche, y allí me empezó a tocar -contaba mi tía- me subió todo mi vestido que llevaba, y por aquel entonces ya tenía buenas tetas, grandes, sí. Por eso, me las agarró bien y me sobó los pezones como nadie lo hizo. Me puso a mil. Solo tenía que quitarme las bragas para que fuera toda suya -me contaba emocionada.
-Sigue, sigue, tía, no me dejes así…-le animaba
-Y él ni corto ni perezoso, me bajó todas las bragas y mi coño estaba más que jugoso, me metió la mano. Uf, sobrina no sabes qué es eso ahí en el coche, detrás, algo del todo prohibido. Me metió los dedos y fue hasta mi culo. Ay… no sé si contarte esto… -dudó mientras en su cara observé el sudor de la excitación.
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-Claro tía sigue, yo tengo que aprender y tú ya sabes bastante, sigue no me dejes con las ganas…
-Bueno -y mi tía Encarna prosiguió- me metió un dedo por ahí detrás, ya sabes, … por el culo, antes lo había ensalivado el dedo, y no veas el gusto que me dio. Fue la primera vez que alguien me tocaba justo ahí. Y me empezó a penetrar el agujero negro con el anular sin cesar. ¡Que tenía un buen tentáculo por cierto!, como una longaniza gruesa de Aragón sin condón. Uf, pues… estaba enloqueciendo a medida que yo le ofrecía el mil arrugas mojado poniéndome de medio lado, toda guarra para él. Piensa que ya me había subido ese vestido de verano y las bragas me había bajado. Mis tetas aún estaban cubiertas por el vestido. Pero la parte de abajo estaba toda desnuda para el invitado descarado.
-Tía qué excitante, me estoy hasta calentando pensándolo -le confirmé.
Mi tía Encarna gordita o Encar como le llamamos en familia siguió contando.
Si queréis más o si os gustó, ya sabéis, ponerme algunas letras que me gustarán y con gusto, os contestaré. Me encantan los susurros eroticos de maduras. Y si son gorditas tetonas como mi tía mejor todavía.
Por cierto, alguna vez he llamado por aquí, pero espero alguna linea erotica lesbianas, o LGTB que también nos merecemos nuestro rinconcito. Mil besitos de tia y sobrina XXX. Cristina Onlyfans.
