Cada día me gusta más el sexo telefonico y os lo dice una mami tetona que no necesita mucho para llevarme a un tio a la cama. Por eso yo paso de quedar con el primero que me dice algo, además, estoy apuntada en páginas de citas normales, digamos, que al final los tíos entran para follar. Y puedo decir alguna como Meetic por ejemplo, que muchas chicas van buscando su príncipe azul y lo que encuentran son ranas con la polla roja. Todos más calientes que la pipa de un indio.
Por eso yo me hago amigos por internet y me caliento con ellos, con alguno quedo, lo tengo que reconocer cuando quiero chupar una polla, cosa que me encanta. Y bueno, lo que más me gusta el sexo telefonico, el telefono, ese juego entre dos adultos cachondos, eso me encanta. Me encanta poner pollas duras y que no me consigan.
Mami tetona traviesa al otro lado de la línea
Por eso cuando me llaman y me dicen que su mujer ha salido de compras o que ella no folla nada y me dicen: «Cariño tengo la polla durísima», me caliento. Hacer cornuda a la mujer, eso me pone calentísima como una perra en celo. Y saber que no me consiguen que solo mis palabras les ponen calientes, con eso juego. Y como he dicho alguno me lo llevo al hotel y me follan por todos sitios.
Además, sé que dos tetas tiran más que dos carretas de molinero, así que para qué decir más cuando me ven los dos melones colgar. Alguna foto he enviado para que se corran en ellas, y luego me las manden corridas. Estoy pensando en vender mis fotos intimas, porque sé que gustan y mucho. Además que soy profesora o era, y eso les pone aún más calentorros. Terminé por un lío de sexo además, porque esto no viene de ahora (otro día lo contaré). Por eso, se ponen como locos a chupar mis pitones y a mí me entran unas ganas de chuparles la pija que para qué. Aquí dejo un poquito de esta mami tetona en edad de merecer más de una cornada al atardecer.
